Come alimento no contaminado de la Palabra de Yehováh como niño

Come alimento no contaminado de la Palabra de Yehováh como niño

Yehováh no quiere que se pierda ninguno de sus pequeños que dependen de EL, por eso envía Profetas para trasmitir Vida m mediante Su mensaje de ARREPENTIMIENTO Y CONVERSIÓN, el que lo consuma practicando es el más grande en el reino de los cielos, esees como un niño que depende Completamente del Padre que le da Su alimento a tiempo, por practicar Su Palabra en su Logos y Rhema de día y de noche, se alinea con Su mismo espíritu y puede llevar Su Nombre con autoridad, fama y poder. 
Salmos 119 103 ¡A mi paladar son dulces tus palabras, más que la miel para mi boca.
Abre la boca y come la Palabra de Vida que es el pan bajado del cielo Yeshúa Ha Mashíaj, hasta que sobreabunde en tu mente y corazón para obedecer el logos y Rhema de Yehováh, solo así podemos tener vida e influenciar con el testimonio audible y visible reflejo de Su Palabra que es el pan bajado del cielo para saciar la humanidad, su alimento penetra en nuestros espiritu y transforma el alma para obedecerla, para hacer conforme a ella, es el mensaje que debemos trasmitir a otros como Ekklesia para Salvación y Vida Eterna.
Juan 15, 5-7
[5]Yo soy la vid y ustedes las ramas. El que permanece en mí y yo en él, ése da mucho fruto, pero sin mí, no pueden hacer nada.
[6]El que no permanece en mí lo tiran y se seca; como a las ramas, que las amontonan, se echan al fuego y se queman.
[7]Mientras ustedes permanezcan en mí y mis palabras permanezcan en ustedes, pidan lo que quieran y lo conseguirán.
Despreciar a uno de estos pequeños que es Su Ekklesia que depende de Yehováh porque se alimentan de su doctrina es depreciar a Yehováh quien la envía por tener su mismo carácter y espíritu. Yehováh no quiere que ninguno de sus pequeños se pierda, por eso ¡No podemos vivir en rebeldia! Solo oyendo y comiendo de Su Pan de Vida que alimenta el vientre espíritual y físico que es dulce como la miel somos transformados a imagen y semejanza de Yehováh. !Qué dulce al paladar es tu promesa, Señor! 

Mi alegría es el camino de tus preceptos, más que todas las riquezas.

Porque solo hay Victoria en Yeshúa Ha Mashíaj 🌻

Ezequiel 2 Salmo 119, Mateo 18

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